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| Carabanzu 2011 |
Yo soy Area, la nacida en luna llena, hija de Area, nieta de Area pues en mi familia heredamos el nombre las primogénitas hasta donde la memoria alcanza. Mi clan era originario de las tierras más al norte de Ástura y habitábamos Ataulia, la orilla que cubren y descubren las mareas.
Mi clan llegó a Carabantium atraído por la leyenda de la piedra negra que conserva el fuego, la piedra que habita en el profundo interior de la montaña. La piedra negra que conserva el fuego tiene el poder del calor. La piedra que conserva el fuego puede llevarse encima, encinta de calor y llama y tiene la magia de la hoguera, pues prende como yesca cuanto toca.
La piedra negra que conserva el fuego tiene el poder de los sueños, la incandescencia del pasado. Las caricias del viento descubren las caras de nuestros antepasados y en su ardiente crepitar perviven sus historias.
En la piedra negra late la sangre de la tierra, el corazón de la Diosa. Y Ella quiso que diera vida y riqueza a los habitantes de Carabantium, y muchos vivieron y murieron por ella.
Cuando mi clan alcanzó Carabantium, fuimos acogidos como hermanos, pues todos somos hijos de la Madre naturaleza. Y aunque llevo la sal y la espuma de la mar en mis venas, somos de la tierra que nos acoge y alimenta, por eso Carabanzu ye hoy mi casa y tengo el honor de recibiros y os invito a entrar en ella.
Bienvenidas, bienvenidos, mujeres y hombres de otras tribus, clanes y aldeas, del llano y la montaña. Hemos saciado con creces el hambre y la sed, ahora toca que renovemos los lazos que nos unen contra el enemigo que acecha, contra Roma y el Imperio. Y así como escuchamos el rumor de las hojas, el aullido del lobo, la llamada de la piedra negra, os escucharemos a vosotros y serán nuestras, desde ahora, vuestras leyendas.
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