Así no vamos a ningún lado. Al final da igual que se reúna la Real Academia de la Historia, que los jurados de los Premios Príncipe de Asturias, la Real Academia de la Lengua, la Federación Internacional de Fútbol o la de Baloncesto, el Fondo Monetario Internacional o la cúpula del partido que sacó adelante la Ley de Igualdad y es adalid de la paridad. No verás más que paisanos, hombrones, y, si acaso, una o dos mujeres (cielos, estamos en el siglo XXI)
Y al final, las únicas que dimiten (o se las cargan con el clásico “no te digo que te vistas, pero ahí te pongo la ropa”) son mujeres también. Los caretos de Carme Chacón renunciando a la carrera presidencial y de Paloma Sainz renunciando a la alcaldía de Oviedo, hablan por si solos: está claro que ellas tenían otros planes, pero donde hay patrón (barón, varón) las decisiones se toman por coyones y el machismo impera. Hala, niñas, a casina que ya estuvo bien de fiesta.
La fe es no creer lo que se ve.
jueves, 2 de junio de 2011
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1 comentario:
Pues habrá que apoyar a las que no se achantan: Rosa Palin, Esperanza Aguirre, Rosa Diez, Pilar Fernández Pardo, Angela Merkel, Margaret Tatcher, pero claro a estas ciudadanas ningún compañeru o compañera se ríe en sus narices con que si son miembros o miembras.
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